Este primer paso se realiza en un software de notación musical del que se extrae un archivo tipo MIDI. Aquí ya es posible escuchar una primera versión de la pieza ya que cada instrumento se graba en su pista correspondiente.
Un software de edición de audio digital importa este archivo MIDI. En este punto se asigna a cada pista su instrumento correspondiente extraído de una orquesta virtual, asignando el piano a la voz humana, si es que se trata de una obra cantada. Con la ayuda de una interfaz de audio, el técnico de sonido nivela el volumen de cada pista y añade reverberación y espacialidad a la mezcla con el fin de obtener un sonido homogéneo. Por último, exporta el trabajo al formato de audio elegido; MP3, WAV…
El resultado es una ejecución enteramente digital de una obra que nadie había tocado ni escuchado en siglos. Si alguien se anima a ejecutar estas piezas, añadirle la pista del canto o versionarla a su modo y estilo, que no dude en enviarnos una grabación para que podamos difundirla desde nuestro gabinete digital.